Asegúrate de tener la tecnología necesaria.
Vas a necesitar un teléfono smartphone o una tableta o computadora con cámara de video y una buena conexión de internet.
Asegúrate de que el dispositivo esté completamente cargado o conectado a la electricidad.
Si no has hecho videoconferencias antes, pruébalo para ver si la cámara funciona bien y que estás suficientemente cerca para una visita de cara a cara.